Algo bueno pasará

Es tarde y las nubes han descendido hasta confundirse con el vapor del asfalto de la carretera. Las sombras de los árboles se mimetizan con mi sombra. He caminado tanto que ya no recuerdo cuando es que comencé. Los días han sido sumamente cortos. La necesidad de alejarme de esta realidad es tan grande que los caminos no serían suficientes para lograr dejar en cada paso la sensación de que algo se puede perder entre el pasto que rodea el camino.

Sin embargo, no es así. El hospital espera y yo no quiero regresar. Ha pasado una semana y no hay esperanza de irnos. Estar tan lejos de casa me abruma y me duele en el alma no poder continuar con mi vida normal.

Braulio está esperando a que regrese. Me pregunto tantas veces si hubiese tenido el valor de irme, de separarme por fin, después de ver esas imágenes en la computadora. Pero sólo fue una discusión descabellada, en la que nuestras hijas tomaron la decisión de que todo debía seguir igual. Ellas ignoraban la situación y yo por dentro sentía que moría en cada respiro. Tuve que continuar, ya había causado demasiado daño años atrás.

Ha llegado el momento de volver, no hay nada ahí, sólo mi respiración agitada.

En aquel lugar, que se ha convertido en mi hogar durante este tiempo, se pierde la noción de la vida misma. La incertidumbre de no saber qué le pasa, al que fue un día lo más importante en su existir, devasta el futuro. 

Me he sentado en las escaleras de emergencia, es un sitio propicio para llorar sin que nadie se percate. La jaula que rodea el espacio deja ver las luces de la enorme ciudad, donde nadie sabe que ella está sola.

A lo lejos, el bullicio de la feria de León llega en oleadas con el viento. Entre lágrimas los pensamientos llegan.

- Qué extraño darme cuenta que hace unos meses atrás, yo ignoraba tantas cosas y me sentía a salvo - Murmuré suavemente para mí.

Y ahora todo era diferente, el mundo no se detuvo para mí, sólo un par de personas me acompañaban a la distancia en breves mensajes de aliento. Pero en general, nadie.

Al limpiarme las lágrimas, respiro profundo y muy dentro de mí, sé que un día, algo bueno pasará.