Jana (segundo paréntesis)
Una persona se puede tornar tan importante e imprescindible en la vida de alguien, desde el momento en el que decide de manera incondicional permanecer. Hay seres que llegan a tu vida en el momento justo para convertirse en personajes de una historia. Eso es Jana en la vida de Julia Eskarra. Ella es una figura fina, sus piecitos son pequeños, como los de una hada de un cuento, sus muñecas dejan salir cualquier pulsera que no esté bien ajustada a ella. Mientras sonríe se llenan sus ojos color marrón de un ligero brillo, en el que se vislumbran , muchos recuerdos de nuestra adolescencia. Sus palabras han sido las compañeras de mis silencios y mis tragedias durante más de veinte años. Recuerdo nuestros primeros encuentros en la adolescencia; en aquel tiempo estaba enamorada de Enrique y ella me brindaba consejos de amor, escuchaba con paciencia una y otra vez, las mismas frases; con paciencia de santa. Conforme pasaban los años, seguíamos de cerca